viernes, 15 de julio de 2016

Se fugan dos presos del cuartel nuevo de la CRAC-PC de Espino Blanco, rumoran

Manuel Montoro
Malinaltepec, Gro.
15 de julio de 2016


Entre los pobladores de la comunidad de Colombia de Guadalupe, municipio de Malinaltepec, trascendió que el día martes 12 de julio, a las 11 de la noche, aproximadamente, se dieron a la fuga dos presos de alta peligrosidad, los que se encontraban purgando una condena.
Pobladores de esta comunidad dijeron que, al parecer, un comandante regional y un policía realizaron la detención de una persona, el día martes a las 11 de la noche, aproximadamente, y al llegar al cuartel nuevo de la CRAC-PC, que se encuentra en una colonia apartada de Colombia de Guadalupe, este comandante regional y sólo un policía (que lo acompañaba), al abrir las rejas de la cárcel estos dos presos de alta peligrosidad se fugaron.
Intempestivamente, estos dos hombres, al ver que el comandante abría las rejas, se le fueron encima y lo golpearon hasta dejarlo tirado y ensangrentado de la cara, momento que aprovecharon para fugarse, en la oscuridad de la noche en la calle, ya que con las recientes lluvias se interrumpió el servicio de energía eléctrica en esta zona de la Montaña, acontecimiento que favoreció los planes de fuga de estos presos.
Esta situación, dijeron estos ciudadanos, está siendo manejada con gran hermetismo por parte de las autoridades comunitarias de la CRAC-PC de Espino Blanco.
Este medio informativo no pudo conocer los nombres de los reos prófugos, pero trascendió que uno es originario del estado de Morelos y el otro es del municipio de Chilapa.
Cabe hacer mención de que este cuartel fue construido en el periodo de Ángel Heladio Aguirre Rivero como gobernador del estado, junto con otro que se construyó en Ayutla de Los Libres, valuados en 7 y medio millones de pesos cada uno, como apoyo del gobernador para el buen desempeño de la policía comunitaria.
Curiosamente, en el caso del nuevo cuartel de la casa de justicia de San Luis Acatlán está en total abandono, y los coordinadores de la casa de justicia de El Tamarindo argumentan que no le dan uso porque estas instalaciones no cuentan con los servicios de energía eléctrica ni de agua potable.