•El juez calificador adjunto a la sindicatura desistió de su responsabilidad de ponerlos a disposición del MP •Entre los implicados, un hijo de la dueña del animalEduardo Añorve |
Cuajinicuilapa de Santamaría, Gro.
17 de junio de 2016
Ante la denuncia de su dueña, policías municipales aprehendieron a tres de cinco presuntos implicados en el robo de una vaca de ordeña, los pusieron a disposición del juez calificador del Ayuntamiento de Cuajinicuilapa, según les han ordenado, y éste los dejó libres, sin ponerlos a disposición de las autoridades ministeriales, como procede y según se había comprometido ante la afectada.
María de la Luz Méndez Añorve denunció ante Diario Alternativo que el juez calificador, Rafael Silva Hernández, auxiliar de la síndica procuradora Josefa Villarreal, actuó injustamente y de manera corrupta al dejar en libertad a tres de los cinco implicados en una vaca de su propiedad.
Según su testimonio, y el de otros testigos presenciales, la mañana del martes 14 de junio, ella y un trabajador suyo se percataron de la desaparición de una vaca, en la zona de Agua Fría, donde tiene su rancho, por lo que la buscaron y se encontraron que el taxista Moisés Jaramillo García, de 45 años, la llevaba en una camioneta del servicio mixto, número 014 de la UTD, del sitio que se ubica en la calle Chapultepec, frente al mercado.
Inmediatamente, él los persiguió, al tiempo que ella notificaba del robo a la Policía Preventiva, consiguiendo detener a la camioneta a menos de dos kilómetros más adelante, rumbo a esta cabecera municipal; desde el inicio de la persecución, él había emparejado su vehículo con el taxi para decirle al chofer que se detuviera, que la vaca era propiedad de Mari Méndez (como se le conoce localmente), pero él no hizo caso, y se paró hasta que lo interceptaron.
En ese sitio se trabó una discusión en la que el perseguidor le reclamó al taxista el robo que estaba cometiendo, en tanto que tres jóvenes también implicados observaban; y en esos momentos apareció la camioneta con los policías, por lo que los tres huyeron, dejando abandonado a su suerte al chofer; posteriormente llegaría ella.
El chofer se defendía asegurando que él estaba haciendo un servicio que uno de los fugitivos pidió por teléfono, pero le contra argumentaban que él era cómplice, pues metió la camioneta a una propiedad privada, por donde se había roto el corral, a cargar esa vaca, y que, incluso, traía la ropa sucia de tierra y monte, producto de esa acción.
Finalmente, en este lugar, los policías preventivos se lo llevaron ante el juez calificador, así como a la camioneta y la vaca.
Entre tanto, Mari Méndez detectó a un taxi que salió de un rancho cercano, lo siguió, le avisó a la Policía Preventiva y estos pudieron detenerlo ya en la cabecera municipal (el rancho del que sustrajeron la vaca está a unos 4 kilómetros), encontrando en el asiento posterior a uno de los jóvenes que huyeron, un menor de edad, de unos 16 años, por lo que detuvieron al chofer y a éste.
Posteriormente supieron que el chofer del taxi, del sitio de la UTD (también de ‘los amarillos’) que están en la calle principal, a un lado del zócalo, de nombre Juan Molina, había sido llamado también por teléfono para prestar un servicio, y que el joven de 16 años también ya había estado involucrado en este tipo de robos, acompañando al hijo de la ahora denunciante, de nombre Jander Román Castañeda Méndez.
Las tres personas detenidas fueron puestas a disposición de Silva Hernández; a Mari Méndez, este funcionario le aseguró que inmediatamente serían puestos a disposición en Ometepec, ante las autoridades competentes, pero se demoró tanto que ella tomó la decisión de adelantarse, acudir a la agencia del MP del Fuero Común e interponer una denuncia de hechos contra estos tres detenidos y contra su hijo y el otro muchacho que huyó con él, de nombre Alexander.
Cuando la agraviada regresó de Ometepec se encontró con la sorpresa de que el juez calificador comenzó a darle largas al asunto, argumentando que la encargada de recibir la denuncia en Ometepec no le tomaba la llamada, aunque en la mañana aseguró que ya estaba todo formalizado y que era nomás cuestión de un papeleo.
Hasta que ella le dijo que se enteró que los detenidos habían sido liberados, y él juez tuvo que reconocerlo.
En este punto, Silva Hernández la estaba llamando a ‘arreglar’ el asunto en Cuajinicuilapa, hecho que hizo que se irritara más, ya aunado a la noticia de que había liberado a los implicados en el robo de su animal vacuno, así que se retiró del Ayuntamiento, profundamente molesta.
En una segunda entrevista con la licenciada ante quien había interpuesto su querella en el MP, ésta le aseguró que en ningún momento el juez calificador de Cuajinicuilapa había intentado llamarla siquiera, por lo que constató que él estaba mintiendo.
Posteriormente acudiría ante las autoridades municipales a recuperar su vaca.
Ante Diario Alternativo, Mari Méndez se dijo profundamente enojada por esta acción del juez calificador, adjunto a la sindicatura, y aseguró que seguirá con el proceso legal que emprendió, contra los cinco implicados en el frustrado robo de su vaca, entre ellos su hijo.
A través de este medio pidió que las autoridades competentes intervengan para que se haga justicia y se castigue a quienes resulten culpables, y que también le finquen responsabilidad a Silva Hernández por dejar libres a personas que fueron capturadas en plena flagrancia.
