sábado, 25 de junio de 2016

Ser indígena repercute en bajo aprovechamiento y Deserción de alumnos: director de Bachilleres de Ometepec

*Otros factores que llevan a desertar a estudiantes son el ausentismo, la reprobación y el bajo aprovechamiento escolar

Misael Damián
Ometepec, Gro.
24 de junio de 2016


En Ometepec se ha detectado que un alumno indígena de nivel medio superior que tiene problemas con el habla, ello repercute en su bajo rendimiento y reprobación en la escuela, el que muchas veces llega hasta desertar por ello, reconoce el director del Colegio de Bachilleres plantel 9, Francisco González López.

Al respecto, dijo que para el estudiante le resulta complicado comprender lo que le están explicando los maestros en su clase, primero, porque no es su lengua materna y, segundo, porque muchas veces lo traduce de forma literal y es un doble esfuerzo; a esto se suma la evaluación del docente, que es igual para todo el alumnado, cuando los alumnos tienen características diferentes, y aseguró que hay maestros que reconocen esta situación, pero que hay pocos que han recurrido a diferentes mecanismos para evaluar.
También habló sobre la discriminación que se da entre los propios alumnos hacia un estudiante que proviene de un pueblo indígena, “de que se da, se da”, que en estos casos les han ayudado los programas Constrúyete y Yo no abandono para motivar a los alumnos; y afirmó que él ha recomendado a los docentes para atender los casos de los estudiantes indígenas, “acérquense, platiquen con ellos; el que no habla, hay que hacerlo hablar”, les dice.
Entrevistado en su oficina, González López dijo que la permanencia de los alumnos en la institución es porque se practican y dan seguimiento a este tipos de programas, que dan una serie de estrategias para el director y maestros, de cómo actuar en ciertas situaciones, y así estar al pendiente del estudiante; afirmó que al revisar bien las directrices del programa Yo no abandono y al compararlas con la escuela Bachilleres se da cuenta de que la cuestión económica no abandera la deserción escolar en el medio superior, antes de esto está el ausentismo, que no se da precisamente por falta de recursos económicos, que conlleva a la reprobación, el otro factor es el aprovechamiento escolar, todo ello desmotiva a los jóvenes y los orilla a dejar los estudios, “cuando tienen demasiadas materias reprobadas, lo más lógico es que piensen en desertar”.
Expuso que, en estos casos, el maestros interviene directamente con el estudiante para diagnosticar el motivo del porqué el ausentismo o el bajo aprovechamiento escolar, “yo no les pido que no les regalen calificaciones, les pido que les apoyen estando al pendiente de ellos”, para ello –dijo– es necesario que se involucre a los padres del alumno, donde, juntos entre padre, alumno, maestro y director, llegar a acuerdos de cómo ayudar para que el educando estudie y logre aprobar la materia si de ello se trata. Afirmó que esto contribuye a gran medida a la no deserción de los jóvenes.
Explicó que muchas veces la falta de motivación del alumno que consecuentemente influye en su bajo aprovechamiento escolar se da porque el maestro no dedica tiempo para él, en su contexto integral, preguntarse “por qué el alumno anda triste o por qué es muy cohibido”, y que el maestro se adentre para ayudar al estudiante, esto beneficia porque le levanta el ánimo; sobre esto, Francisco González concluye diciendo que ante estas necesidades el docente deberá preparar su clase, no enfocándose solamente en la parte académica, sino también en cuestiones afectivas, es un motivante para que el alumno se sienta incluido, porque hay veces que el docente dedica más tiempo para el que sabe y al que está en bajo rendimiento lo relega, por eso es necesario tomar en cuenta cómo afecta “la discriminación y la falta de atención”.
En el caso de internet, reconoció que las redes sociales influyen más negativamente en los estudios del educando, ya que hay unos que pasan con el celular gran tiempo observando “cosas” que no le producen nada, a que estén atentos con sus notas de clases, pero que sí, este tipo de tecnología se aprovecha para sacar avante el trabajo académico de los maestros.  
El Colegio de Bachilleres, plantel 9, ubicado en esta ciudad, siempre se ha distinguido como un centro serio ante la sociedad, porque ha tenido durante años una eficiencia terminal apropiada; por ejemplo, en este año concluirán sus estudios 114 estudiantes de alrededor de 150 que ingresaron hace tres años, ello pone en alto en nombre de la institución, pues en otros subsistemas apenas llega a terminar el 50 por ciento.
Actualmente cuenta con dos turnos con un total de 330 alumnos y con un total de 23 trabajadores, entre el director, administrativos y docentes.